El diente, parte fundamental del sistema digestivo
El diente es una parte de la cavidad bucal la cual forma parte sistema digestivo. Cumplen una función importantísima, el acto de la masticación.
La masticación permite la liberar de enzimas y lubricantes en la boca, lo que, junto con la masticación de los dientes, produce la descomposición de los alimentos, en trozos o sustancias mas pequeños. Por lo tanto, en la boca, se inicia los primeros pasos del proceso digestivo.
Los dientes son estructuras formadas por tejidos muy duros, ya que tienen que realizar el proceso de la masticación lo cual supone una carga importante. Gracias a ellos, los alimentos son desgarrados, cortados y molidos, de esta forma se preparan para poder realizar la deglución.
El diente y su función
Los incisivos son los dientes de la parte central de la boca, los que más se ven en la sonrisa. Existen 4 incisivos superiores y 4 inferiores. Su anatomía hace que la función de estos sea cortar los alimentos.
Los caninos son los dientes que están a lado y lado de los incisivos. Hay 2 en la parte superior, uno en cada lado, y 2 en la inferior, son dientes afilados y largos. Siendo su principal función la de desgarrar y arrancar los alimentos.
Los premolares se ubican seguidos de los caninos y antes de los molares. Hay un total de 8 premolares: 4 arriba, dos a cada lado, y 4 abajo. La función de los premolares es ayudar a triturar los alimentos.
Los molares se sitúan por detrás de los premolares, al final de la boca. Existen 12 molares en la boca de un adulto, tres a cada lado. Su función principal es triturar y masticar los alimentos.
El diente y la digestión
A modo de resumen después de citar las funciones principales del diente recordamos que los dientes cumplen una función muy importante en la nutrición.
Dentro del funcionamiento del sistema digestivo la primera etapa o lugar donde comienza la digestión de los alimentos que comemos es la boca, que está formada por la lengua, las glándulas salivales, paladar y dientes.
La función primordial de los dientes es la fragmentación de los alimentos para poder ingerirlos de forma correcta.
Los dientes parten, desgarran y muelen los alimentos de forma coordinada para facilitar el paso de estos hacia el tubo digestivo.
Por el contrario, la falta de dientes hace con que las personas no puedan masticar correctamente los alimentos provocando una repercusión y problemas en la salud general. Ya que la falta de dientes no les permite realizar su correcta y usual actividad masticatoria.
¿Sabes para que sirven también? Ellos también influyen en el habla.
Los dientes nos ayudan e emitir sonidos, son muy importantes para la fonética del lenguaje. A esto le sumamos que nos permiten tener una sonrisa agradable y bonita.
Los dientes, al igual que todos aquellos órganos que conforman nuestro cuerpo, están conformados de tejido que puede ser afectados por factores exógenos y endógenos.
Entre los factores endógenos por referirnos a lo que sucede dentro de nuestro cuerpo, está la nutrición.
El diente y su proceso de nutrición
Los dientes al igual que cualquier otro órgano o hueso de nuestro cuerpo necesita nutrirse para para gozar de una buena salud. A continuación os dejamos una información bastante práctica y útil en cuánto a la nutrición del diente.
Entre los alimentos se destacan como altamente beneficiosos para la salud del disnete se encuentran los lácteos, las frutas, los cerales, las verduras y las carnes, estos aportan; vitaminas A, C, B1,B2,B6, D, proteínas, F e, Mg, K, Ca, P. entre otros más aportados por una buena alimentación y sumando acciones externas.
La salud del diente necesita que tomemos carne, huevos, leche, queso, yogures y frutas.
¿Cómo llegan los aportes de la alimentación al interior de los dientes?
Los dientes están conformados de forma básica por:
- El esmalte
- La dentina
- El cemento
En su interior existe una pequeña cavidad ocupada por la pulpa dental con abundantes vasos sanguíneos y nervios.
Refiriéndonos a esta última, la pulpa dental se encarga de llevar la energía y nutrición interna a las células dentarias.
Los elementos nutritivos pasan a los dientes por medio de los vasos sanguinos que por ella pasan.
¿Sabías que el diente posee su propio sistema circulatorio?
De forma microscópica la sangre es llevada a cada rincón de nuestro cuerpo mediante tubos elásticos con una gran capacidad de flujo sanguíneo como lo son las arterias, venas y capilares; cada pieza dentaria posee en su interior una cantidad moderada para abastecer las necesidades nutricionales y energéticas de las células dentarias.
A partir de la circulación general sanguínea un pequeño porcentaje de flujo se dirige a nuestro maxilar y mandíbula hacia nuestros dientes.
Los alimentos ricos en calcio y vitaminas son los más adecuados para mantener la vitalidad y fortaleza de nuestros dientes.
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